viernes, 25 de marzo de 2011

la soledad como condena

miramos morir al otro y a pesar de la pena nos reconforta nuestra supervivencia.Sin embargo,en la medida en que ese otro nos fue necesario,la soledad se erige como una condena o castigo,que obliga a ser digerido en el desarrollo de una readaptacion.Sin duda,esta resulta mas facil cuando se resuelve mediante la integracion a grupos afines,para sentirse vivo.

defensa concreta de la soledad

Cuando,como consecuencia de una sociedad que promueve el egoismo,la avaricia y la superficialidad,las personas olvidan los limites que sus apetencias llevan a desconocer sobre los del projimo,se hace necesaria la defensa concreta de la soledad.El viejo dicho afir.ma:"mejor solo que mal acompañado".La seleccion de las compañias es un hecho,necesario,que entra en conflicto con el deseo de superar el aislamiento,porque somos animales sociales ,con apetito de trascendencia,de comunicacion.Es entonces cuando el yo debe requerir sus fuerzas interiores,acudir a sus reservas,buscar salidas,nuevos lenguajes y mensajes,para lograr su supervivencia.